Una mezcla de emociones se vivió en la Superbowl LII a cargo de Justin Timberlake

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El artista Justin Timberlake, actuó por tercera vez en uno de los actos más esperados del año y el  más importante de la temporada, realizando  una actuación que mezcló coreografía, ritmo y emoción.

 

El estadounidense saltó al campo con fuerza, con uno de sus temas más conocidos, ‘Rock Your Body’, para posteriormente cantar ‘Sexyback’ y ‘Cry Me A River’, dos canciones llenas de coreografía y luces. Finalmente llegó el momento que todos esperaban, ya que Timberlake realizó un homenaje al cantante Prince, actuando junto a él con un holograma suyo en sincronía, siendo este uno de los momentos más comentados de la Super Bowl.

 

Sin duda, uno de los momentos más épicos de su presentación, fue cuando Timberlake estaba cantando su famosa canción  "Can't Stop The Feeling", y  de pronto empezó a subir las escaleras para llegar hasta el público. Entre los asistentes se encontraba un niño, quien inmediatamente decidió hacerse una selfie con el cantante y éste accedió sin problema,  sin embargo, la reacción del pequeño desencadenó el fenómeno de la Super Bowl: sus gestos  de confunsión  lo convirtió en el meme de la noche, incluso muchos han bromeado en redes sociales, asegurando que la memoria de su celular se llenó y nunca existió tal selfie.  

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Por Ginger Lara

Fuente: Página oficial de Revista Vanity Fair

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